viernes, 15 de julio de 2011

Chico duro.

Él sigue ahí con sus Ray-Ban negras, tapando cualquier sentimiento visible en su mirada, ese cigarrillo que frena más de una sonrisa, unas converse algo desgastadas con el tiempo, ese tiempo que tardó en enamorarse, en confesarlo, en decir un "te quiero", pero ¿para que mentir? Ese tiempo no había llegado, dudaba que llegara, él era.. distinto, diferente, duro, un chico duro. No creía en el amor, ni en la amistad, no creía en las sonrisas verdaderas, en las cosas inolvidables, no creía en el infinito, en la segunda estrella a la derecha, no creía que hubiera una persona especial, para él, una chica dura. Hasta que la encontró, sus miradas se posaron, unos segundos bastaron, milésimas para darse cuenta, ahí estaba ella, la chica, su chica. Sí, había tardado en llegar, pero llegó, con sus Ray-Ban y su cigarrillo, con ese aire de dura, de fuerte, de .. "nada ni nadie me hará sufrir" pero.. todo lo contrario, había sufrido bastante, lo suficiente para ahora ser así, como él, dos almas gemelas, su primer "te quiero", su primera sonrisa verdadera, su primera cosa inolvidable, su primer infinito, su primer y último amor.


2 comentarios: